Hace 30 años, en 1981, el primer caso se reportaba y en 1986, ya era el via crucis del mundo. El pánico se apoderaba de la sociedad y comenzaba el reloj a contar hacia atrás para determinar hacia donde terminaría la carrera.
EN los 90´s, ya no era pánico, sino miedo, pero aún existía el tache social que te condenaba a un encierro personal.
Hoy, es una excusa para afectar a otros emocionalmente y la ignorancia ayuda a provocar más males psicológicos que lo que realmente lo provoca.
Hablamos del SIDA, una palabra que se
ha vuelto igual que negro, latino u homosexual. Se ha vuelto una palabra discriminatoria y punto de partida de ataques ignorantes al no entender como es que funciona realmente y como se ha dado la diferencia en 30 años.
Después de 1986, el mundo no sabía como reaccionar ante una enfermedad misteriosa que afectaba a la salud de las personas neutralizando su sistema inmunológico y dejando a la víctima a la disposición de cualquier enfermedad. Y aunque primero se le consideró la enfermedad gay, pronto mujeres, ricos, probres, estadounidenses, europeos, latinos y muchos más, terminaban infectados.
Pero mientras la gente creaba sus propios estigmas y castigos sociales en contra de este aborrecimiento, la ciencia comenzaba a trabajar para encontrar un modo de disminuir los peligros de este misterioso enemigo.
Al entrar los 90´s, ya no era una enfermedad exclusiva e iba por todos, pero afortunadamente la medicina comenzó a encontrar tratamientos adecuados para minimizar los efectos de la enfermedad y se empezó a entender la diferencia entre tener VIH y estar en la etapa de SIDA.
Entrando en el nuevo milenio, ya no era el puñal mundial que rasgaba al mundo como a finales de los 80´s, pero su permanencia fue clara y lo ha sido globalmente.
Hasta la fecha, el virus del VIH sigue propagándose en el mundo. El continente de África es el que mayor efectos tiene en cuanto a esta enfermedad debido a los bajos recursos de los países africanos. Europa y América han aprendido a manejar más los efectos de la enfermedad aunque países como Rusia, prefieren esconder las estadísticas reales de sus habitantes infectados para no admitir que no pueden, o no quieren luchar en contra de la enfermedad y lo consideran un estigma político que se puede prestar para la burla internacional.
Pero hoy en día, con los tratamientos y cuidados necesarios, el VIH se puede comparar con enfermedades como la Diabetes, no desaparece, pero se puede vivir normalmente siguiendo las instrucciones correctas.
Y a pesar de que no hay una cura para esta enfermedad, existen personas que han vivido más de diez años con el virus y han demostrado que luchando, se puede hacer cualquier cosa.
Es por eso que invitamos a todos a cambiar su modo de ver las situaciones relacionadas con el VIH. No nada mas preguntes, lee y edúcate acerca de que es el VIH y que es el SIDA. Y aunque no estés infectado, aprende, nunca sabes cuando conocerás a alguien que lo tenga. Si ya lo tienes, no te preocupes, edúcate bien acerca de lo que debes hacer para poder tener una vida tranquila y óptima. Si hay gente que ha vivido incluso hasta 20 años, tienen una vida normal y la siguen disfrutando, tú por qué no?